CAPÍTULO 1. ~Vive tus sueños.~

CAPÍTULO 1. VIVE TUS SUEÑOS.
-Sofía, baja a comer. –Me gritó mi madre desde abajo.
-Vale mamá. –Dije levantándome de la cama. Llevaba desde las diez de la mañana en la cama. Pensando. Con pocas ganas de vivir, la verdad.
Me conecté al Messenger y ahí estaba Marco. Os preguntareis quien es Marco. Marco es un chico, un chico mágico, increíble, perfecto, y sí. Salí con él hace unos meses y me di cuenta de que no era lo que estaba buscando, lo que esperara que el fuera. Me encantaba, desde siempre me ha encantado, desde los 3 años que entré al colegio y lo vi cogiendo de la mano de su maestra, despertó en mi algo increíble. No sé, ahora tengo 15 años y hasta hace unos meses sentía lo mismo. Como ya he dicho salí con él, estuvimos saliendo 5 meses, pero yo necesito a alguien que me comprenda. Lo de que me comprenda lo digo porque odiaba a Justin y eso para mí ya dice mucho. Estuve 5 meses intentando aguantarlo todo pero al final tuve que explotar y decirle a la cara todo lo que me había callado. Le dije que no aguantaba que hablara así de mi ídolo, porque para mí lo es todo. Es mi vida y lo amo, lo amo como nunca a nadie, es mi razón de vivir. Mi razón de sonreír, de estar feliz, de disfrutar de la vida. Somos muy diferentes y decidí acabar con esto. Lo sigo queriendo, si, es complicado olvidarse de alguien que te ha importado tantísimo durante mucho tiempo. Ahora nos llevamos mejor. Marco es un chico guapísimo, pero guapo guapo como los que hay pocos. Moreno con los ojos azules, tirando a verde. Para mí era increíble. Se me abrió una pestañita de msn, era Marco.
Marco dice: Guapa!!
Sofía dice: Guapete (:
Marco dice: Te quería comentar una cosa.
Sofía dice: Dime jajaja
Marco dice: He cambiado.
Sofía dice: Como que has cambiado?
Marco dice: Que no puedo vivir sin ti..
Sofía dice: Marco, he conocido a alguien… 
{Hablo de Sergio, Sergio es un chico. Es el primo de un amigo mío. Javi. Lo conocí hace un tiempo y me estoy ilusionando con él. Aún no ha pasado nada. Pero estoy algo ilusionada}.
(Se quedó unos minutos sin contestar)
Marco dice: ¿Quién es?
Sofía dice: No lo conoces, no es de aquí.
Marco dice: Bueno, no me quiero entrometer en nada, pero quiero que quedemos, te tengo que decir algo que por aquí no puedo.
Sofía dice: Vale, quedamos.
Marco dice: A las 11 y media en el parque de detrás de tu casa, vale?
Sofía dice: Vale, voy a prepararme.
Marco dice: Adiós, un besazo.
Sofía dice: Hasta ahora, besitos.
Fui hacia mi habitación y me vestí. Me puse una camiseta de rallas azules y amarillas y unos pantalones largos vaqueros, rotos. Me dejé el pelo suelto y me tiré dos mechones para atrás dejándolos a los lados cogidos con pinzas. Me rizé por abajo un poco, me puse gloss transparente. Cogí mi móvil y mi Ipod. Puse a Justin y entré en mi mundo, “that sould be me“. Tarareaba bajando las escaleras. Y salí hacia el parque, llegaba tarde.
-Hola. –Dije sonriendo mientras llegaba.
-Hola. –Me dijo con un tono de vergüenza.
-Estás adormilada eh. –Dijo riendo.
-Me he despertado hace poco. –Dije riendo.
-Hay tontita. –Dijo tocándome la nariz.
Miré para abajo, ahora la que tiene vergüenza soy yo.
-Bueno, que tenías que decirme. –Le dije.
-Pues… que siento todo lo que pasó, y que… -Dijo.
-¿Qué…? –Dije.
-Que he conseguido esto… -Dijo dándome un sobrecito.
Lo abrí, y ¿sabéis lo que había dentro? Sí, había dos entradas de pista para el concierto de mañana de Justin Bieber. Me puse a llorar. Sorprendidísima, estaba buscando la cámara oculta, porque esto era demasiado para ser real.
Me puse la mano en la boca, y tan solo le abracé.
-Esto, esto, esto es… -Dije secándome las lágrimas.
-Lo siento por todo, aquí está la respuesta. 
-Dios mío, muchas gracias. –Dije volviéndole a abrazar.
-Te lo mereces.
-¿Vendrás conmigo? –Dije.
-¿Lo dudabas? –Dijo.
Lo tenía enfrente, tenía enfrente al chico que más he querido en la vida, con sus ojos increíbles. Azules. Maravillosos. Brillantes. Ahora mismo la estoy liando, pero la adolescencia es complicada. Una lucha eterna. Lo besé. El me devolvió el beso. Lo volví a besar.
-Lo siento. –Dije.
-¿Por qué? 
-Porque siento que estoy jugando contigo y con Sergio.
-Lo que acabas de hacer lo has hecho porque has querido. ¿Verdad? –Dijo.
Le miré. Agaché la mirada y cambié de tema. -Puf muchas gracias. –Dije mirándole.
-¿Quieres que quedemos mañana antes del concierto? –Me pregunta.
-Vale. Si quieres voy a tu casa antes. –Digo.
-¿Hasta mañana? –Dice con una sonrisa enorme en la cara.
-Hasta mañana. –Le abracé.
No puedo creer lo que está pasando. Esto es irreal.